Por: Leticia Rojas

Son dos culturas que recorren el mundo, tienen estilos opuestos y siguen pasos totalmente diferentes, pero tienen algo en común: comparten la misma pasión por el baile. 

En las plazas de La Serena, un fenómeno cultural se está desarrollando con gran revuelo, ya que decenas de jóvenes se reúnen cada semana para ensayar coreografías de Caporales y K-Pop. A primera vista, estas dos culturas pueden parecer opuestas en términos de estilos y pasos de baile, pero lo que las une es una pasión compartida por el arte del movimiento.

Los Caporales, una danza folklórica originaria de Bolivia, destaca por su energía, la elegancia de sus trajes y su influencia de la cultura afro-boliviana. Mientras que el K-Pop, un género musical y de baile surgido en Corea del Sur, se caracteriza por su enfoque en la sincronización, coreografías elaboradas y una estética moderna y colorida. A pesar de estas diferencias, ambas culturas han conquistado corazones en todo el mundo y se han convertido en un fenómeno global, reflejando la capacidad de la danza para trascender fronteras y unir a las personas a través de la música y el movimiento.

Ambos estilos de baile son practicados durante todo el año en la ciudad, específicamente en los espacios públicos como la Plaza de Armas, en medio de la Avenida de Aguirre, también en la Plaza Nobel Gabriela Mistral y la Avenida Balmaceda a un costado de la iglesia La Merced.

K-Pop: Ritmo y diversión

Monserrat Ramos, quién bailaba K-pop en la Plaza Nobel Gabriela Mistral, contó que comenzó a bailar en ese espacio a mediados del 2016 en un grupo, «porque era un espacio grande y nos podíamos posicionar bien sin que alguien nos empujara, además gracias a este lugar nacieron muchas amistades”. 

Ramos aseguró que “la mayoría de los que bailábamos ahí éramos estudiantes, ya que arrendar o pagar una sala para bailar era extremadamente caro porque cobraban por una cierta cantidad de horas”. 

Por su parte, Julieta Perez, bailarina de K-pop en la calle Balmaceda contó a #EsHoy que como grupo «escogimos bailar al lado de la iglesia La Merced, porque hay espejos lo que hace sea más fácil perfeccionar nuestros movimientos y sincronización cuando interpretamos una nueva canción de K-pop”.

También, aseguró que la ubicación de los ensayos es estratégica, debido a que «si se nos hace tarde estamos en un lugar céntrico lo que hace que sea más fácil tomar locomoción”. Igualmente relata que son solamente estudiantes y poder ensayar en un salón es económicamente complicado.

El Folklore vive en la Plaza de Armas

Carolina Flores, bailarina y parte de la junta directiva de la agrupación Caporales San Martín La Serena, explicó a #EsHoy que «como agrupaciones nos coordinamos para ver en qué sector danzar y establecer los días y horarios de ensayo”.

Estos hombres y mujeres, inspirados por la belleza y la energía de estas expresiones culturales, se reúnen regularmente para perfeccionar sus movimientos y coreografías, con la mira puesta en futuras presentaciones dentro de la región y en todo el país.

El buen uso de los espacios públicos para la práctica de actividades culturales como este es un ejemplo de cómo una comunidad puede aprovechar sus recursos compartidos para fomentar la creatividad y el entendimiento mutuo. Estas plazas se convierten en un escenario donde dos culturas muy diferentes se unen para celebrar su amor por el baile, demostrando que la pasión y la música pueden crear puentes que superen las diferencias.