En Chile 11 personas de cada 100 mil habitantes mueren por daño autoinfligido. Eso pondera al país en el cuarto lugar de fallecimientos por esta causa a nivel americano, cifró la Organización Panamericana de Salud (OPS) en su informe del 2021.
Hace varios años, distintas organizaciones han velado por la prevención del suicidio, de hecho, cada 10 de septiembre se conmemora este día a fin de visibilizar las acciones que se pueden tomar para ayudar a una persona que está decidida de terminar con su vida. De esta forma, nace la cruzada impulsada, entre otros organismos, por la Organización Mundial de la Salud: «Septiembre Amarillo», la que abarca el mes, semana y día de su prevención.
Para este año, el lema es “Crear esperanza a través de la acción”, el cual refiere la OMS que «refleja la necesidad de una acción colectiva para abordar este problema urgente de salud pública».
«Hay muchos aspectos del suicidio que lo hacen especialmente trágico: el grave sufrimiento emocional de quien se quita la vida; los sentimientos de pérdida, abandono o culpa de los familiares y amigos que quedan atrás; y es tan permanente y muchas veces por problemas que se pueden solucionar», argumentó la directora de la OPS, Carissa F. Etienne.
Mustang amarillo
El color amarillo se escogió en correspondencia al programa Yellow Ribbon (cinta amarilla), fundado en 1994 por los padres y amigos de Mike Emme, quien que se quitó la vida a los 17 años.
Emme poseía un Mustang amarillo que él mismo había restaurado, que para sus conocidos era la principal motivación de su vida. Por el contrario, el joven estadounidense llevaba tiempo pasando por ideaciones suicida y no sabía qué palabras decir para expresar que estaba enfrentando esta situación, acabando con su vida repentinamente.
Tras su fallecimiento y en medio del funeral, tanto amigos como familia iniciaron la campaña de la cinta amarilla, distribuyéndola junto a una tarjeta que decía: «Si lo necesita, solicite ayuda».
Las señales
Durante la pandemia la ideación suicida se acrecentó. Existen diversos factores que se entrelazan para desencadenar este acto, estos determinantes pueden ser tanto biológicos, psicológicos y sociales, sin embargo, hay que hacer presente que con una detección temprana y ayuda integral son totalmente tratables y curables.
Por esta razón, es necesario derribar los mitos más comunes respecto de las señales que presenta una persona atrapada en una depresión y con intención de autoinfringirse lesiones mortales son:
- Si una persona habla del suicidio, nunca lo hará. Por el contrario, esta puede ser la señal que te está dando para pedir ayuda.
- Los suicidios no dan aviso. En su mayoría, los intentos de suicidios vienen precedidos por señales de advertencia.
- La persona que tiene intensión suicida está determinada a hacerlo. La persona que enfrenta esta situación, tiende a tener ideas ambivalentes sobre la vida y la muerte.
- Hablar de suicidio lo estimula. Encontrar a una persona con quien compartir el dolor y sus pensamientos reducirá las posibilidades de realizar un atentado contra su vida.
¿Cómo ayudar?
Una persona que está enfrentando la ideación suicida fundamentalmente necesita apoyo de su entorno y, por sobretodo, profesional. Dentro de las acciones que puedes realizar si visualizas que hay una persona cerca de ti que podría atentar con su vida es:
- Permanece atento a comportamientos inhabituales y de riesgo.
- No juzgues, discutas ni reproches su manera de actuar. Escúchalo y proponle alternativas de ayuda médica y psicológica para sus situación.
- Informa a quienes sean más cercanos sobre la situación que está atravesando la persona y de la importancia de darle apoyo, aunque sea a distancia.
En Chile, el fono Salud Responde puede ayudarte con esto: 600 360 7777 + opción 1.