Chile es reconocido por ser un consumidor importante de vinos. Muchas veces, escoger un buen vino puede ser algo complicado, ya que la gran variedad puede confundir a , junto a los mitos que lo rodean.

En primer lugar, es necesario saber que existen cuatro grandes vino según la edad: Sin Crianza, Crianza, Reserva y Gran reserva. Tiene que ver con el período de envejecimiento del vino, variando desde 6 a 60 meses.

Es común escuchar la frase “mientras más años tenga el vino, mejor”. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no necesariamente esta bebida alcohólica por tener más años será mejor, pues al ser un producto vivo, el vino tiene un ciclo de vida, un punto óptimo de consumo. La edad del vino, se mide por añada (año de cosecha del mismo). Todas las añadas son distintas, pudiendo la misma cepa, tener características diferentes en función de múltiples factores que afectan la calidad del vino, como el factor climático o el lugar donde se conserva.

Por otra parte, el vino se puede clasificar según la cepa o tipo de uva que lo forma, ya sea uva roja o blanca. Entre los más importantes existe el Chardonnay, Sauvignon Blanc, Cabernet Sauvignon Merlot y Carmenere. Todos se consideran buenas cepas respecto a cada gusto personal.

¿Cómo escoger un buen vino?

Con 14 años de experiencia en el rubro de alimentos y bebidas, Sebastián Martínez Parada, Mixólogo Molecular conversa con #EsHoy acerca de la calidad de los vinos en Chile y la variante de precio-calidad: «El vino es un fermentado que principalmente es muy ceremonial, siempre presente en ocasiones especiales», sostiene uno de los fundadores de Cantineros Chile.

Asimismo, comenta que el vino «es transversal porque puedes encontrar precios elevados como también buen vino a un precio accesible, ya que somos un país productor de muy buenos vinos, la relación precio calidad es bastante atractiva. Cabe mencionar que viñas chilenas cada vez más están en constante innovación, ofreciendo más variedades en rose o espumantes», señala.

¿Un vino caro significa que el producto es mejor?

Sebastián señala que si el producto es de marca conocida, aumenta su valor. «No en todos los casos, hay algunos que por tradición han ganado un nombre y cobran más caro. Si vas a pagar un precio elevado es por el proceso distintivo de la marca, la tradición y el status, como un Chadwick o un Don Melchor»

«Pero si vamos a la situación país, desde 5 mil pesos para arriba puedes encontrar un muy buen vino. Somos un país extenso y cada cepa encuentra su mejor forma de madurar a lo largo del país. Por eso los vinos blancos son tan buenos en la Región de Coquimbo y los Cabernet muy buenos en el Valle de Casablanca o los Syrah en el Maule. Por ejemplo, en Copiapó, el trago pajarete y hasta el pipeño es bueno, ya que su proceso es ancestral y actualmente la gente prefiere lo natural o en su estado más primitivo», indica Sebastián.

Ya conscientes que un precio elevado no significa más calidad, la siguiente duda es en qué fijarnos cuando compramos vino. Frente a esta situación, el Mixólogo nos recomienda guiarnos por nuestra necesidad de acompañar el vino con alimentos, o el gusto que busquemos en vinos más amargos o dulces. «Hay tres clasificaciones que nos piden guiar: Varietal, reserva y gran reserva, y luego están las cepas». Las carnes rojas van excelente con un vino tinto y el vino blanco coincide con pescados y mariscos.

Otro tema complejo al elegir es el recipiente que contiene el liquido, donde Martínez señala que el envase poco y nada coincide con la calidad «Es solo un tema de romanticismo, el Tetrapack está hecho tecnológicamente para preservar el contenido, al igual que el corcho o la tapa rosca, ambos son válidos, solo que el corcho es más tradicional».

Si la intención es regalar un vino, existen varios detalles que deben ser observados a la hora de elegir uno de calidad, según el experto. Si la intención es regalar una botella, él recomienda un reserva Carmenere «Sin dudas, es la cepa más importante de nuestro país». Este es un excelente acompañante de platos hechos a la parrilla, como el lomo liso y otras carnes magras, además de cortes como el cerdo y el cordero.

Finalizando la conversación con el experto vinícola, él destaca que al momento de descorchar y catar el vino, debemos fijarnos siempre en las cualidades que lo hacen especial. «Siempre va a depender de la cepa y guardado que haya tenido, ideal leer la etiqueta donde nos describe el vino e intentar hacer el ejercicio de catar con nariz y luego con boca, comprobar y juzgar uno mismo. El catar es un ejercicio complejo, que solo en la práctica se logra la maestría, pero se puede leer al respecto para mejorar y así sentir los aromas y sabores. De esta forma educamos los sentidos para así saber elegir», Sentencia.