A lo largo de la historia la danza ha ido evolucionando y a su vez integrando muchísimos estilos y formas de practicarlo, para muchos esto sirve de distracción, para botar lo malo o simplemente disfrutarla, pero: ¿has pensando en sanar mediante la danza? En #EsHoy te contamos en profundidad lo que es la danzaterapia, cómo funciona y sus principales beneficios.

La Danzaterapia según la ADTA (American Dance Theraphy Association) “el uso psicoterapéutico del movimiento como proceso que tiene como meta integrar al individuo de manera física y emocional”, método que surgió en los Estados Unidos en la década de los años 40.  En este tratamiento se utiliza la danza y el movimiento con fines terapéuticos para alcanzar la integración de procesos corporales, emocionales y cognitivos. Así lo reconoce Carolina García, psicóloga, bailarina y danzaterapeuta, quien considera a esta disciplina como una forma de psicoterapia en donde no integra solamente la mente y la emoción, sino que también  al cuerpo, el cual se encuentra aventajado.

“En primer lugar, el cuerpo tiene memoria a partir de cada experiencia que nosotros vamos viviendo nos expresarnos corporalmente de una forma distinta, entonces aquí en la danzaterapia se promueve este movimiento libre para que la persona vaya expresando con su cuerpo de una forma muy auténtica”. En este contexto, García sostiene que “el cuerpo no miente, vale decir, que cuando una persona expresa el lenguaje de la danza es mucho más genuino, expresar de mejor forma los  pensamientos y emociones, ya que estas pueden ser muy variadas dependiendo de las personas. Una persona que está alegre va a danzar distinto a una persona que está triste y así cada uno va a tener su propio lenguaje a medida que lo va sintiendo”.

En cuanto al proceso de enseñanza, la bailarina indica que “la metodología que se utiliza es de sesiones grupales, en donde se trabaja con un tema específico para todas las personas y en sesiones individuales con un trabajo muchísimo más personalizado y la persona dice qué es lo que quiere trabajar para hacerlo en conjunto con el o la danzaterapeuta”.

Movimientos que llenan de vida

Una sesión de danzaterapia normalmente debe incluir un pre caldeamiento que es centrar a la persona en el “aquí y ahora” sin música, se pueden hacer ejercicios que se enfoquen en el enraizamiento de la persona en el medio en el que está.  Luego está el caldeamiento, en donde la persona va bailando libremente para conectarse aún más con el presente y con su cuerpo. Después viene el desarrollo en donde se trabajan temáticas más específicas, para luego pasar al cierre en donde está: el cierre bailado, la persona realiza su integración de la sesión a través de la danza, el cierre escrito, que utiliza una bitácora, en donde la persona puede hacer un dibujo, escribir una frase o escribir lo que se le venga a la cabeza de lo que vivió en la sesión y el cierre de palabra o cierre hablado, que es hablar en el círculo en conjunto con las otras personas y contar cómo fue su experiencia.

Carolina García destaca que es importante el enfoque bajo el que uno trabaja, porque no todas las terapias van a ser iguales. “Por ejemplo, la danzaterapia, método danza de la vida, se basa en los cuatro elementos, como yo además de ser danzaterapeuta soy psicóloga, le agrego mi enfoque psicológico a las sesiones: el trabajo emocional debe ser progresivo, ya que no se puede partir un ejercicio hablando de tus emociones, por eso se habla de la estructura de pre caldeamiento/caldeamiento”.

Dentro de los principales elementos que caracteriza a la danzaterapia es su inclusividad, “en el sentido de que considera a los distintos tipos de lenguaje que puede tener una persona, tanto a las que se expresan verbalmente como también las que expresan mediante su cuerpo, siendo esta última más considera, debido a que la danzaterapia ve a las personas como sus propias creadoras y personas activas en su proceso de sanación, confiesa la psicóloga.

De la misma forma, la joven profesional cuenta que “aquí es la misma persona a través de su danza que va descubriéndose y sanando sus asuntos pendientes porque va reconociéndose de mejor forma y va siendo mucho más consciente de sí mismo, además de que al bailar se borran esos pensamientos automáticos que uno tiene día a día”.

Beneficios de la danzaterapia

García afirma que la danza es una forma de ejercicio físico y de por sí es terapéutico, “hablando en términos biológicos se liberan distintas sustancias químicas que ayudan a la persona a sentirse mejor como la endorfina y la dopamina que producen la sensación de placer y la sertralina como antidepresivo que uno produce a través del ejercicio. Asimismo, está el desarrollo de la creatividad, mejora del estado de ánimo, aumento de la autoestima y la reducción de sentimientos de soledad”.

Dentro de los beneficios se reconoce el insight, concepto de psicología, en el que la persona se va dando cuenta de muchas cosas y a su vez tener un mayor nivel de reflexión. “Con el insight, en las sesiones de danzaterapia se vienen a la mente pensamientos de cosas que pudieron haber pasado hace años y que en gran parte fueron experiencias traumáticas (…) a veces, el cuerpo almacena estas experiencias traumáticas pero uno no las procesa, entonces a través de estas sesiones tú vas recordando estas hechos a través de revivir, reeditar resignificar. Esta última es el nivel más elevado donde uno ve esa experiencia traumática y le da otro significado original al que tiene”.

¿Qué lo hace diferente a las otras danzas?

Cualquier tipo de danza va a ser terapéutica, ya que por si le hace bien a las personas, sin embargo, la psicóloga resalta que “en la danzaterapia se abordan temáticas humanas, en las sesiones uno no solamente la va a pasar bien, sino también a trabajar asuntos en donde hay que pasar por momentos de dolor para ir sanando” y agrega que “una como terapeuta, cuando la persona señala lo que quiere sanar, se selecciona la música y todo enfocado a lo que se quiere trabajar, se debe tener una preparación para acompañar a la persona en el proceso  psicológicamente, pues eso en las danzas no se utiliza, es una vivencia individual. En cambio, aquí es el terapeuta que te va acompañando en todo lo que tú vayas viviendo, tienes ese respaldo”.

Cabe destacar que cualquier persona puede formar parte de danzaterapia, desde niños/as que dan sus primeros pasos hasta adultos mayores. Sin embargo, se debe tener en cuenta la planificación de las sesiones, pues existe la diferencia entre personas que tienen o no conocimiento previo, como también a los más pequeños en donde se hacen más juegos. Incluso a personas en situación de discapacidad porque no es necesario el uso de todo el cuerpo, sino que se utilizan ciertas partes, dado que la danza va conectada con la libertad y que la persona fluya de cualquier forma.

Por: Jimena Vargas Toro