Un equipo de 6 voluntarios responde llamados de personas que necesitan orientación, especialmente en este tiempo de emergencia sanitaria donde el confinamiento, las enfermedades y la soledad pueden afectar aún más.
En el mes de julio, el Programa Ecológico en Salud Mental Comunitaria del Servicio de Salud Coquimbo decidió lanzar Línea Esperanza, un centro de atención telefónica de ayuda gratuita y abierta a toda la comunidad con el propósito de acercar a las personas en tiempos de pandemia. Contención emocional que es brindada de forma voluntaria por un equipo de seis trabajadores comunitarios, quienes día a día atienden en promedio nueve llamados.
Fernando es una de las personas detrás Línea Esperanza. Él se unió al Programa Ecológico hace un tiempo atrás, luego de atravesar una complicación muy grande relacionada con salud mental. “Acudí al CESFAM donde pertenecía y ahí conocí el programa. Me interesó un montón porque era un modelo de salud integral, no solo desde lo médico, sino que veía al individuo y a la familia como eje fundamental de desarrollo. Fue así como conocí el Programa Ecológico y me fui desarrollando y adquiriendo distintas habilidades con respecto a mi rol comunitario. Mejoré habilidades para poder entregar lo que el programa me entregó a mí”, señala.
Cuando se abrió Línea Esperanza, Fernando ya poseía una amplia experiencia en el programa, participando en comités autogestores, la escuela de educación continua y siendo coordinador de grupos de autoayuda, por lo que decidió sumarse. Un trabajo que asegura requiere de permanente construcción, pero que lo llena de satisfacción desde el primer llamado. “Fue muy especial, muy emotivo. Es difícil contarlo muchas veces, porque en definitiva son situaciones muy especiales, personas con las cuales me he logrado comunicar. Esa primera llamada fue muy gratificante, es de alguna manera una relación muy personal, tanto para quien llama como para quien recibe, y creo que todos los objetivos se cumplieron”, recuerda.
“Lo que dijo hizo un clic tan grande en mí, aunque fue una palabra, me dio esperanza”
Lissette es usuaria de Línea Esperanza. Ella habla por lo menos una vez a la semana con Fernando vía telefónica, momentos en los que aprovecha para decir lo que le pasa y hacer una catarsis. “Empezamos a tener contacto y a hablar temas de la contingencia, de la pandemia, de salud mental, de la cesantía y de lo que nos afectaba, por ejemplo lo que sucedería después o si vamos a volver a ser los mismos. Yo un poco me desahogaba con él y a la vez formábamos un diálogo donde me podía dar a conocer lo que opinaba. Fue muy bonito, muy enriquecedor”, comenta.
Fue en una de esas conversaciones, donde la percepción de Lisette cambió completamente. “Una de las veces que él llamó, yo tenía mucha depresión, estaba muy triste por una situación, entonces le dije que a veces nosotros los usuarios de salud mental tendemos a mirar mucho la muerte. Hace 3 años mi hermano se suicidó, se quitó la vida, entonces nosotros tendemos a ser más emocionales, más pasionales, y acercarnos al tema de la muerte como una solución a veces. Y él en esas conversaciones me dice hay dos caminos: o mirar la muerte o mirar la vida. Y eso hizo un clic tan grande en mí, que fue como un mensaje casi sobrenatural, aunque fue una palabra, me dio esperanza. No sabemos lo que nos depara el día de mañana, pero sí tenemos esa posibilidad, de mirar la vida”, recuerda.
Para ella, estas palabras calaron muy hondo, y las define con el mismo nombre de la iniciativa que tanto destaca: una esperanza. “Si una persona se siente así y está por ejemplo padeciendo violencia intrafamiliar, estando encerrada en cuatro paredes mirando el techo, o deprimido porque no tiene trabajo, es necesario que nos comuniquemos con alguien que nos dé una palabra. Como te digo, bastó que Fernando me dijera mira la vida, algo tan sencillo como eso, que puede pasar desapercibido para cualquiera, para mí fue una llamada de atención de decir claro, mira la vida, enamórate de la vida, y ahí uno va reflexionando y va adentrándose en más cosas que a uno le hacen bien”.
Línea Esperanza: apoyo y orientación de lunes a sábado
El centro de atención telefónica de Línea Esperanza está disponible de forma gratuita para toda la comunidad, de lunes a sábado entre las 12:00 y las 20:00 hrs. a través de los siguientes números:
Lunes (+56) 9 7514 5968
Martes (+56) 9 5728 0756
Miércoles (+56) 4278 3520
Jueves (+56) 4239 6925
Viernes (+56) 9 7907 8120
Sábado (+56) 9 8186 6038
Es importante destacar que el trabajo comunitario es complementario al que realiza el equipo de salud mental.